Días atrás se produjo un hecho que alarmó a la ciudad, sin trascender lo que quienes entraron a uno de los comercios más grandes de la ciudad de Carlos Tejedor se llevaron. Fue por la parte de atrás, y sin duda, aún sin detalles, no deja de inquietar. Igualmente en un establecimiento educacional tejedorense, se produjeron hechos desagradables por parte de autores anónimos, que a la par del hecho del comercio narrado, deja abierta la posibilidad de tener que estar alertas y lógicamente de proceder a avisar a las autoridades guardianas del orden, ante cualquier cosa “rara” que se observe en la ciudad.
la ciudad como rotura de carteles, caída de antenas de radio y más, asustó a los vecinos que atinaron a verla al caer la noche totalmente electrificada color azul “eléctrico” de punta a punta… ¿qué es lo que pasó?, no se pudo saber, y como tiene un pararrayos puede haber sido algo afín, aunque no se sintió ruido alguno. En charla con quienes lo vieron, se comentaba que electricidad no pudo ser, ya que si así hubiere sido, las cientos de cotorras que allí viven estarían muertas, sin embargo no pasó nada. En fin…
Un fenómeno como el de la tormenta que comentamos en el párrafo anterior, más la piedra en el camino a Curarú, las franjas de lluvia tan diferentes en cantidad entre lotes de vecinos, no eran comunes , a nuestro pobre entender, pero son cosas que pasan y habrá que acostumbrarse a ello.-
Hubo días atrás tres accidentes en los caminos cercanos a la ciudad de Carlos Tejedor, principalmente en el camino a Colonia Seré. El hecho de la tierra que se levanta a grandes velocidades, la forma del camino que no permite separarse mucho del medio, ya que así el auto se puede ir abajo, y quizás, la confianza de utilizarlo seguido, han mostrado que hay que respetar los caminos de tierra. Gracias a Dios no ha habido lesionados en estos encuentros violentos entre auto y auto, pero con eso no se juega.
Ya vemos en las vidrieras los manequíes de niños con hermosos guardapolvos blancos en clara señal que estamos a poco de iniciarse el nuevo año escolar.
Vimos en la calle un ratón de considerable tamaño , cosa que hacía tiempo no veíamos.Recordamos que hace unos años había ratitas que se metían en los hogares , aumentando las ventas de tramperas en los comercios de veterinarios, donde había chicos, y de veneno donde solo vivían personas sin chicos. Por eso, se han cotizado los gatos, ya que” su sola presencia impone obediencia”, como dice el tango, y la naturaleza los dotó para hacer que los roedores se alejen de su territorio.
También te puede interesar:
Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de sanciones legales.
Aquel usuario que incluya en sus mensajes algún comentario violatorio del reglamento sera eliminado e inhabilitado para volver a comentar.
