Crónica de lxs pibxs tejedorenses en la vigilia por el aborto legal

Por Carola Urdangarín, periodista, 21 años

 

En el grupo de whatsapp ya sentíamos que la Tierra iba a temblar de nuevo. «¿Vienen?», «¿Por dónde andan?», «Manden la ubicación». Así empezaba a la tarde la vigilia que nos agolpaba a cientos de miles de pibas y pibes en las calles del Congreso.

Medio en joda-medio en serio, hablando con un amigo de cómo las pibas más chicas estaban moviéndose a la marea feminista más hermosa de la historia, tiramos la idea de crear un grupito. Lo hicimos  el 14 de febrero de este año. Un grupo más. Probablemente sea para silenciar, pensé. Puede parecer una estupidez y probablemente lo sea: fue el día de los

enamorados. Sí, es una estupidez.

 

Algunes nos conocíamos (volvió el lenguaje inclusivo amigue bancala), otres eramos ya amigues. Algunes vivíamos  (vivimos) en Ciudad de Buenos Aires y otres en La Plata. Empezó como ungrupo feminista de estudiantxs de Tejedor en las dos ciudades pero cuando vimos la fuerza abrumadora de las estudiantas de secundaria entendimos que no había edad, ciudad de residencia o nivel de escolaridad que pudiera dejar a alguien afuera. Así que eso somos. En el grupo pasamos todo el tiempo capturas de pantalla de las publicaciones más machistas y antiderechos que se cruzan por nuestros inicios (sobre todo de Facebook). Nos burlamos de eso y nos convencemos de que vamos por el lado del bien (así que, ¡cuídese Don/ña!).

Cada tanto, cuando se organiza alguna marcha, nos juntamos algunes, tratando de coordinar. Pero esta vez no había alternativa. Juntes o separades íbamos a copar las calles del Congreso para gritarle a lxs diputadxs que estamos firmes. Que somos, que estamos y que si el patriarcado no se cae, lo vamos a tirar.

Ayer fuimos muchxs. Algunxs pudimos estar juntxs y otrxs mandaban fuerzas por whatsapp a la distancia. Hicimos temblar la Tierra otra vez. Un millón de personas movilizadas. No sé si alcanzamos a ver la dimensión: un millón.

Los 4°C no nos frenaron!! Nos morimos de frío, nos poníamos las frazadas de polar, los gorros, los guantes, y nos los sacabamos al rato para volver a bailar. Fue una verdadera fiesta. Nos sentimos enormes. El corazón estallado. No sé si estas palabras alcanzan para transmitir el orgullo que nos da estar siendo parte de este día histórico. No eramos una masa gritona. Eramos pibas y pibes diferentes, re diferentes. Todes luchando por lo mismo pero en la diversidad. Sin guerra de partidos. Sólo con baile, mate -algunes con un vinito pa pasar la fresca- y unas ganas de que sea Ley que no les puedo explicar.

Así estuvimos. Algunes se fueron a dormir a la noche y volvieron a la mañana, otres nos quedamos hasta la madrugada. Otres ni siquiera pudieron ir pero se morfaron las uñas toda la noche prendidos a Youtube para ver si esta utopía daba el paso enorme al Senado.

Toda la noche haciendo el poroteo. Toda la noche contando los votos. Gritando que cómo carajo se le ocurre a unx diputadx estar «indeciso». ¡Indecisx podes estar cuando no sabes si llevar o no paraguas, hermanx! ¿Te pagamos vuelos, hospedajes y una vida acomodada para que me digas que estas INDECISX?

«Cerrado», dijo Monzó. Y a todxs se nos paró el corazón, cada uno desde su lugar, separadxs pero juntxs. El Proyecto de ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo tiene media sanción. Y nosotros llevamos el olor a la tierra tejedorense que nos une a pesar de toda la mierda que recibimos a veces de nuestro propio pueblo. En facebook nos están diciendo «asesinas», «putas», «matabebés».

Somos, estamos. No representamos a nadie más que a nosotrxs mismxs. Si el patriarcado no se cae, lo vamos a tirar. No importa nada. Llevaremos más frazadas, cargaremos los termos y vamos a dar la pelea que consideramos necesaria para que este país tenga un poco más de Justicia Social. Que no sea tarde, viejo. Que no se les haga tarde para sentir orgullo de que la juventud del pueblo está viva, y tiene la conciencia social que ni lxs legisladorxs supieron tener. Aborto legal YA.

 

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