Algo lógico: la perdida del valor adquisitivo de la moneda o la inflacion

POR EL CR. VÍCTOR JORGE MONZÓ GARDINER

El comercio comenzó con algo sencillo y en una forma básica: el trueque o dar algo a cambio de “lo que necesito”. Con el avance de esta actividad y en la medida que fue prevaleciendo “lo que quiero” sobre “lo que necesito”, se ideó un elemento de cambio común a todos los participes en esa actividad  trocadora… apareció entonces el dinero, la plata o los pesos; éste bien como todo bien de cambio, cuanto mas difícil es conseguirlo, mayor será su valor para cambiar; y mucho mas si pienso, como en general ocurre, que la cosa que tengo para ofrecer, tiene un valor de cambio en dinero con tendencia al infinito, ya que considero que es lo mejor que tengo para entregar…

El dinero en los países administrados por aquellos que engrupen a los habitantes de esos países y que se autocalifican de populares, se consigue de

manera muy fácil. En lógica consecuencia – siguiendo la línea de razonamiento anteriormente enunciada -, el valor de cambio del dinero pierde importancia, ya sea incrementando la cantidad para cambiar o bien, disminuyendo la calidad de la cosa o servicio que se ofrece porque la idea de “que es lo mejor que tengo para entregar”, continuará siempre vigente.

Toda esta actividad de trueque se desarrolla en un sitio que se denomina “mercado”. A éste sitio concurren varios agentes, la oferta, la demanda y  un agente que se invitó por interés y asistirá con un arma poderosa que si bien no mata, SI SE SABE UTILIZAR, OBLIGA…ese agente no es otro que el Estado, “empuñando”  el arma de los impuestos…el estado fue, es y ¿será? en nuestro país, poco serio o poco respetado…ve el problema inflacionario del lado del mostrador que no habita, sin darse cuenta que entregando livianamente  el elemento de cambio común a todos los participes, o sea el dinero, la plata, los pesos,  motivará indirectamente la elevación del valor (en dinero, plata o pesos) de la cosa que se cambia por él…o bien se disminuye la calidad del bien o servicio que se ofrece, no se que es peor.

Y esto no tiene límites mientras que “lo que necesito” NO prevalezca frente a “lo que quiero”.

Ahora bien, actualmente en nuestro país se intenta poner freno a la inflación mediante un congelamiento de precios, fijando un tope al valor de lo que se entrega a cambio de lo que cuesta conseguir  con poco esfuerzo… pero increíble y absurdamente se hace sin renunciar a absolutamente nada, “matoneando” a los empresarios, sin mover un punto porcentual de lo que tiene derecho el Estado como por ejemplo, la alícuota del impuesto al valor agregado y ni siquiera en los bienes de primaria necesidad…y ése impuesto representa en el precio final casi una quinta parte de su valor…

Las causas de la inflación son muchas. Los “remedios” para controlarlas sin una dosis de respeto, seriedad  y ejemplaridad son estériles…

Y COMO VAMOS ES MUY POCO SERIO, ES TRISTE, ES LAMENTABLE…

HE DICHO UNA OPINIÓN….

 

CR. VÍCTOR JORGE MONZÓ GARDINER

Contador Público (U.B.A.)  Tº115 – Fº 123 – Legajo 29670-8

C.P.C.E. Pcia. Bs..As.

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