5 meses de Sala Intendente: El caballo de batalla de la salud (para propios y extraños)

“Y ahora van a salir con el caballito de batalla del Hospital Garré”, aseguró en plena campaña del 2013 un político. Tres años después, con cambios en el “color” político que gobierna, la salud sigue siendo el centro.

Ya lo debe haber detectado Sala, y lo tienen muy en claro la oposición: En salud no puede haber errores. El Intendente en campaña cuestionó duramente el sistema de salud municipal, y ha tenido logros. La oposición también conoce esos cuestionamientos y,  es por eso, que no le van a dejar pasar un solo error. “Vamos a ver si es tan fácil como él decía”, se escucha decir a algunos “opositores”. Aunque también hay otros calmos,  de los que dicen que hay que dejarlo actuar.

Sala ganó una batalla importante,  y que parecía imposible: 

Curarú ya tiene médico estable,  y Timote casi también. Algo similar ocurrió con el cirujano y la obstetra en épocas de Gianini, desde la oposición lo planteaban como imposible y se pudo.

Vayamos ahora a otros hechos no tan gloriosos. No iban ni tres meses de gobierno y Battista convocó a una conferencia de prensa y dio a conocer el despido por parte de Sala del ex Director del Hospital Garré que se desempeñaba como enfermero.

Lo siguió que dejó de funcionar el aparato de rayos x. Nuevamente Battista presentó un pedido de informe. El planteo no parecía loco “si venían a revolucionar el sistema de salud, ¿Cómo se demoraron para comprarlo?”. Finalmente, tras algunos meses,  se comprará el mejor existente y pasará a ser digital, generando ingresos para el propio Hospital.

Lo último fue el caso de una embarazada que debió ser atendida en Tres Algarrobos. Para el oficialismo fue un caso aislado, y el equipo médico estuvo a total disposición. Para la oposición se trató de una grave falencia que pone de manifiesto la falta de una partera adicional. Agravado por la falta de una ambulancia cuando ocurrió un accidente en un partido de futbol.

A esto hay que agregarle que en el inicio de la gestión de Sala los médicos cobraron mal, y algunas horas extras de “empleados rasos” no se habrían pagado. Por lo pronto, enfermeros solicitaron reunión con el Intendente, la mantuvieron y podrían tener buenas noticias.

El Intendente también se reunió con los pediatras, y según la fuente que se consulte los detalles son diversos, pero el resultado sería positivo.

A mediados de mayo, el Intendente recorrió habitación por habitación el hospital, y visitó a todos los enfermos. Se colocaron timbres, lo que mejoró la atención.

Además, continuaron todos los especialistas, y el anestesista (había rumores de que no iba a continuar). Se están colocando los equipos de aire y calefacción central nuevos, capacitaciones,  se estudia un posible reescalafonamiento para enfermería,  y cámaras en los hospitales

Pero, políticamente,  todo será poco, la atención estará puesta en la terapia intensiva, el gran pedido de Sala como Concejal, que ahora deberá concretar.

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