En Argentina ¿Es viable la profesión Farmacéutica?

Por el Dr. Juan José Prieto, Farmacéutico Nacional

Como es de público conocimiento el Ministerio de Salud de la Nación Argentina entendió que la profesión farmacéutica se ha desarrollado en otros ámbitos o modalidades, siendo necesario enmarcar a los distintos adiestramientos constituyendo especialidades farmacéuticas.

Fue así que a través de la resolución 1186, publicada en el Boletín Oficial del día 28 de agosto de 2013, el Ministro de Salud de la Nación aprobó el Listado de Especialidades Farmacéuticas.

Para más información recomiendo visitar la

página del Ministerio de Salud-Presidencia de la Nación (observatorio de recursos humanos en salud) http://www.msal.gov.ar/observatorio/index.php/fuerza-de-trabajo/regulacion-del-ejercicio-profesional/104-especialidades  o directamente el link de la Resolución del Ministerio de Salud Pública Nº 1186/2013 http://www.msal.gov.ar/observatorio/images/stories/documentos_fuerza_trabajo/Ajuntos%20Regulacion/Resolucin_1186-EspecialidadesFarmaceuticas.pdf

En la misma se determinaron como especialidades la de Farmacia Hospitalaria, Farmacia Comunitaria, Farmacia Industrial, Farmacia Sanitaria y Legal, Esterilización, Nutrición y Análisis de los alimentos y Bio Farmacia.

La certificación de las especialidades farmacéuticas en la jurisdicción de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires será un proceso voluntario llevado a cabo por el Colegio de Farmacéuticos y Bioquímicos de la Capital Federal, que registrará las certificaciones de especialidad otorgadas según las instrucciones que le imparta la Dirección Nacional de Registro, Fiscalización y Sanidad de Fronteras.

A su vez, el Ministerio de Salud entiende que resulta pertinente armonizar, con las jurisdicciones provinciales, cuáles especialidades deberán ser reconocidas en todo el país, con el objeto de estimular su formación en función de las necesidades de la población.

Es así que el Ministro, Dr. Juan L. Manzur, invitó formalmente a los Ministros pares, miembros del Consejo Federal de Salud (COFESA), a adecuar las normativas jurisdiccionales que permitan la aplicación de la presente resolución en la medida que corresponda.

En mi opinión, y en contraposición con quienes visionan un futuro funesto para nuestra profesión, esta nueva decisión ministerial no solo la jerarquiza sino que  denota que la viabilidad de la profesión farmacéutica dependerá de las necesidades sociales (que son evidentes), y sobre todo de nuestras actitudes cotidianas en el ejercicio profesional, donde nos subrayan que debemos ser responsables debiendo actuar en forma beneficiosa sobre la salud de quien lo requiera.

Con esta resolución, la profesión Farmacéutica Argentina amplía su abanico de posibilidades, que implicará la especialización permanente para desarrollar con decoro las acciones que correspondan; esto indica ser especialistas, lo que implica que nuestros actos, conocimientos y habilidades sean de tal magnitud que no se nos pueda reemplazar con facilidad.

Es evidente que un especialista no solo tiene los conocimientos propios de la profesión sino aquellas habilidades que exige el cotidiano ejercicio profesional; allí es donde se nos imponen permanentes desafíos que se hacen específicos a cada área de trabajo. Por citar un ejemplo, la Farmacia Comunitaria es un compendio de tareas distintas a otras ramas de la profesión; quienes allí se desempeñan deben tener conocimientos, habilidades y conductas especiales para este ámbito de competencia que deben indudablemente ser netamente profesionales y estar completamente alejadas de lo comercial.

Para lograr este último punto es necesario la permanente búsqueda de la excelencia a través de la capacitación y  el asesoramiento, utilizando la formación continua tan indispensable a la hora de dar respuestas a los numerosos desafíos que hallamos en la resolución de las demandas de nuestros pacientes; definitivamente nuestro accionar le dará un valor agregado a la salud de quien la necesite y de todo el sistema sanitario.
Como conclusión esta resolución, la 1186/13, que reconoce las especialidades de la profesión farmacéutica, es un logro más que hacen a una profesión viable.