El Cóndor: Sueltitas

En diálogo con uno de los profesionales médicos de nuestra ciudad, el Dr. Adrián Mendoza, nos comentó que el miércoles pasado, 13 de julio, se cumplieron tres años de la primera operación con el sistema laparoscópico que hiciera en nuestro Hospital Municipal “Garré”. Sin duda ello fue un muy buen adelanto para la cirugía en nuestra ciudad, por lo que no dejamos pasar ese comentario de Adrián y lo queremos reflejar en esta columna.

Al ocuparse la prensa del país respecto al triunfo en la Ciudad de Buenos Aires del Ing. Mauricio Macri, en un aparte, detallan uno de

sus propósitos, de ser triunfador nuevamente el próximo 31 de julio, que toca de cerca de Carlos Tejedor. Leemos que el mismo “ya tomó la primera decisión : creará el Ministerio de Gobierno a partir de diciembre – siempre que la tendencia se mantenga – y vuelva a asumir. También tiene el nombre del Ministro : Emilio Monzó, un dirigente peronista que estuvo al frente del armado nacional del PRO , hasta que Macri decidió bajarse de la pelea presidencial. La información fue confirmada a Clarín por tres ministros.”

 

El lunes a las 7 horas, pudimos ver a varios vecinos casi enojados. Se trataba de quienes querían retirar dinero de los cajeros de los dos bancos locales, y no funcionaban, posiblemente por problemas ajenos a las entidades tejedorenses. Eso fue el diagnóstico que hicieron quienes estaban en procura de sus dineros, pues las pantallas tenían los mismos términos informando de que no se podía sacar pesos. Uno de los presentes, que tenía que viajar temía que en su destino pasara lo mismo y no disponía de plata. Cosas que pasan, y es así nomás pasan…

 

Un detalle pequeño pero que alguna vez tratamos en esta columna, es el “medio “ lomo de burro frente al local de la firma Néstor Dameno. El mismo hacía que los vecinos sabedores de su existencia, hicieran una curvita para esquivarlo, y a veces con otro vecino que llegaba del otro lado, donde no había tal promontorio. Por eso, ahora se puede pasar derecho sin tener que molestar a quien llegue al lugar, pero de la otra mano.-

 

Cuando hace poco escribimos de lo bien que estaban las marcas luminosas de la Ruta 226 en sus curvas, agregándole de que faltarían más para verlas bien, fue luego del accidente que protagonizara una camioneta en la curva antes de las vias en Curarú. Quizás por eso se hizo el trabajo de marcado, pero queda corto. Varios caños pintados más ,asunto terminado, y chau peligro.

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